Dios nos necesita a nosotros, no nosotros a él. Desde siglos que el humano busco justificar sus dudas mediante la simpleza de adjudicarlo a una deidad divina. Claro esta, no somos capaces de conocer y aprender la enorme cantidad de cosas que esconde este universo, y el preguntarse a diario el por qué y el cómo de las mismas es algo por lo que todos atravesamos en algún momento.
Hoy en día, dialogando con gente pude observar como cada vez es mas frecuente la gente que intenta buscar otra alternativa a las cosas sin recurrir a la facilidad de Dios o lo que su religión le haya enseñado. Planteamientos universales de que hay más allá, como se generó el principio del principio, y si el final esta más cerca de lo que esperamos o nunca lo esta. Considero, que la necesidad de respuestas es tan grande que la ansiedad nos gana y nos frustra constantemente.
Hay personas que evitan plantearse dudas, por miedo a nunca tener una respuesta clara y verificable, lo que me hace pensar que triste debe ser el perderse lo magnifico de plantearse interrogantes a cosas que van más allá de nosotros, indagar sobre lo que nos encierra, lo que nos hace tan pequeños y curiosos.
Es por eso que él dibujo que les dejo el día de hoy, solo intenta demostrar como la mente colectiva tiene en sus mentes a un Dios aislado, alejado... que nos necesita para seguir estando, para justificar su benevolencia sobre nosotros y perdonarnos por ser tan inquietamente personas llenas de interrogantes.
¿La curiosidad mató al gato o la curiosidad mató a Dios?
¿Dios esta muerto?
¿Dios esta muerto?
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